1-¿Quién es el profeta Isaías?

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 1-¿Quién es el profeta Isaías?

El Misterio del Hijo de Dios y Cristo a través de los tiempos. Por Milton Alonso Granados.

Isaías, según la tradición nació en la ciudad de Jerusalén, alrededor del año 765 antes de Jesús. El profeta Isaías, es uno de los profetas más importantes y venerados en la tradición judeocristiana. El ministerio profético de Isaías llegó a durar casi medio siglo, desde fines del gobierno de Azarías, rey de Judá, hasta los tiempos del monarca Manasés. Isaías profetizó durante los reinados de varios reyes de Judá, su ministerio se extiende desde el siglo VIII al siglo VII, antes de Jesús.

Los principales reinados mencionados en el libro de Isaías son:

1. Uzías (Azarías), también conocido en algunas traducciones como Ozías: Reinó desde el año 792 hasta el 740, antes de Jesús. Según la tradición talmúdica, Isaías fue primo del rey Uzías y pariente de los reyes contemporáneos de Judá.

2. Jotam, hijo de Uzías: Reinó desde el año 740 hasta el 736, antes de Jesús.

3. Acaz, hijo de Jotam: Reinó desde el 736 hasta el año 716, antes de Jesús.

4. Ezequías, hijo de Acaz: Reinó desde el año 716 hasta el 687, antes de Jesús.

5. Manasés, hijo de Acaz: Reinó en el reino de Judá desde el año 687, hasta el 642 antes de Jesús. Este, fue uno de los reyes más longevos en el trono de Judá, con un reinado de alrededor de 55 años. Durante su gobierno, Manasés se apartó de la adoración al Dios verdadero y promovió la idolatría en el reino. Sin embargo, al final de su vida, se arrepintió y buscó restaurar la adoración al Dios de Israel.

Isaías recibió su llamado profético, como siervo del Señor, en una visión en la que vio al Eterno sentado en un trono alto y sublime.

El momento en que se le dio el llamado profético a Isaías se relata en Isaías 6:1-8. Según este pasaje, Isaías tuvo una visión en la cual vio al Señor sentado en un trono alto y exaltado en el templo. En la visión, serafines estaban alrededor de Dios y proclamaban su santidad. Al presenciar esta visión, Isaías se sintió consciente de su propia pecaminosidad y la de su pueblo.

En ese momento, uno de los serafines voló hacia Isaías con un carbón encendido del altar y lo tocó en los labios, purificándolo de su pecado. Entonces el Señor preguntó: "¿A quién enviaré, y quién irá por nosotros?". Isaías respondió: "Heme aquí; envíame a mí".

Fue en ese encuentro y llamado divino que Isaías recibió su comisión profética. Dios lo llamó para ser su mensajero y proclamar sus palabras al pueblo de Israel. A partir de ese momento, Isaías se convirtió en uno de los profetas más destacados del Antiguo Testamento, transmitiendo mensajes de juicio, arrepentimiento, consuelo y esperanza a la nación de Israel y a los reyes de Judá.

Isaías profetizó durante un período de agitación política y crisis espiritual en Israel, advirtiendo sobre el juicio y el exilio que vendrían como resultado de la desobediencia del pueblo.

El ministerio de Isaías se caracteriza por su profunda preocupación por la justicia social y la pureza religiosa. Criticó la corrupción y la injusticia de los líderes y llamó al pueblo a vivir vidas justas y éticas. Isaías también anunció la venida del Mesías; el siervo del Señor, que traería salvación y restauración al pueblo de Israel.

Isaías fue un estadista, asesor de reyes, poeta, orador y escritor. A Isaías, se le considera uno de los grandes profetas hebreos y por su legado escritural es conocido como “el Príncipe de los Profetas."

Isaías tuvo una influencia significativa sobre Israel y Judá. Sus profecías abarcan temas que incluyen advertencias y llamados al arrepentimiento, promesas de salvación, juicio sobre las naciones y consuelo para el pueblo de Judá en tiempos de crisis políticas y religiosas.

La esposa de Isaías fue una mujer profetiza (Isaías 8:3). Tanto el nombre de Isaías (Dios Salva) como el nombre de sus dos hijos, son proféticamente significativos.

1. El nombre de uno de sus hijos es, Maher-salal-hasbaz, que significa el despojo se apresura.

En Isaías 8:1-4, Dios instruye a Isaías a nombrar a su hijo con este nombre que tiene un significado simbólico. Este nombre simboliza el mensaje profético que Isaías debía transmitir al pueblo de Israel en ese momento. Anunciaba la inminente invasión Asiria y la derrota del reino del norte de Israel.

La conexión del nombre del hijo de Isaías radica en que Maher-salal-hasbaz, era una señal viva del juicio inminente y la destrucción que caería sobre el pueblo de Israel. Este nombre es un recordatorio constante del mensaje profético y el destino que le esperaba a Israel si no corregía sus acciones.

2. El nombre de su otro hijo es, Sear-jasub, y significa, un remanente volverá. El nombre de Isaías, como el de sus dos hijos están ligados a la historia de Israel y de Jerusalén (Isaías 7:3; 8:1).

En Isaías 7:3, Dios le indica al profeta, que lleve a su hijo a una reunión con el rey Acaz. El nombre "Sear-jasub" se traduce como "Un remanente volverá" o "El remanente volverá".

Este nombre tiene un significado simbólico y representa un mensaje de esperanza y promesa para el pueblo de Israel en medio de un tiempo de crisis y peligro.

El nombre señala que, a pesar de la inminente amenaza de los enemigos de Israel y la posible destrucción, Dios preservaría un remanente del pueblo y permitiría su regreso y restauración.

En la historia de Israel, el nombre de Sear-jasub se relaciona con el llamado a confiar en Dios y a no desesperarse ante las circunstancias adversas.

Isaías usó a su hijo como un símbolo viviente del mensaje profético de que Dios no abandonaría por completo a su pueblo, sino que preservaría un remanente fiel y los restauraría en el futuro.

El libro de Isaías se divide en tres secciones principales.

1. La primera sección (capítulos 1-39) contiene principalmente oráculos de juicio y condena contra la idolatría, la injusticia y la falta de confianza en Dios.

2. La segunda sección (capítulos 40-55) se enfoca en la consolación y el anuncio de la salvación y restauración del pueblo de Dios.

3. La tercera sección (capítulos 56-66), aborda el cumplimiento de la obra mesiánica, la esperanza del nuevo cielo y la nueva tierra, junto con advertencias contra la hipocresía religiosa.

El mensaje de Isaías no solo fue de gran impacto en su época, sino que su contenido trasciende su contexto histórico y se aplica a la experiencia humana en general. Su énfasis en la justicia, la misericordia y la redención ha influido profundamente en la teología y la ética religiosa de todos los tiempos.

En resumen, en su ministerio, el profeta Isaías se centró en transmitir las palabras de Dios al pueblo de Israel, llamándolos al arrepentimiento, la justicia y la confianza en Dios. Su legado profético, y la introducción de la obra de Cristo como Mesías de Dios, no solo produjo resultados importantes en su tiempo, sino que su mensaje sigue siendo relevante y significativo en la fe y la práctica religiosa hasta el día de hoy.

El Misterio del Hijo de Dios y Cristo a través de los tiempos. Por Milton Alonso Granados.

Próximamente: El significado del nombre Isaías.