El Ministerio del espíritu. ¿Quién tiene la Verdad? N.2
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El ministerio del espíritu.
Para poder ser capaces de reconocer el ministerio del espíritu determinado en el Nuevo Pacto es importante entender que este está dirigido a completar nuestra vida unificándola a Cristo Jesús. Hoy en día escuchamos muchas diferentes y muy variadas corrientes bíblicas todas con la intención de hacernos mejores personas. Sin embargo, viene a ser de suma importancia que seamos capaces de determinar c o discernir cuándo una enseñanza está completamente fundamentada sobre el marco o fundamento del camino que nos lleva a la vida y la verdad.
Es solo hasta que tengamos estos tres principios claramente establecidos que finalmente estaremos preparados para encontrarnos con el ministerio neotestamentario del espíritu o nuevo pacto, con el que el cual estoy seguro su vida entrará a un nuevo plano de completa y total bendición.
Introducción.
- Tres pasos hacia la verdad divina.
Juan 146Jesús le dijo:
Yo soy el camino, y la verdad, y la vida.
Al iniciar
este maravilloso recorrido de fe es importante considerar las palabras de
nuestros Señor a la hora de proclamar la base o fundamento sobre el cual descansaría
su ministerio y por ende el Nuevo Pacto.
Uno, sin
importar cuán oscura pareciera estar la noche y cuan difíciles las
circunstancias hay un camino, debemos de tener presente que este no es cualquier
camino, sino uno que tiene objetivos o parámetros eternamente establecidos para llevarnos a su verdad y a la vida.
Toda verdad
que recibamos de Jesús y su evangelio debería producir vida y señalarnos con
claridad el camino a seguir. No deberíamos clamar tener la verdad si no experimentamos también la
claridad de su camino; tampoco deberiamos proclamar estar sobre el camino correcto si su gracia y poder no se manifiesta
como debiera a nuestro alrededor. En resumen, el camino, la verdad y la vida siempre irán de la mano porque ellos representan a JesuCristo y su evangelio de vida y poder.
Juan 1010 …yo he venido para que tengan vida, y para que la
tengan en abundancia.
- Efecto de la verdad de Jesús.
Juan 4.
14mas el que bebiere
del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré
será en él una fuente de agua que salte para vida eterna.
La verdad de Dios cuando llega a nosotros es simple, nos hace olvidar nuestros más difíciles problemas y nos produce felicidad y libertad.
Jesús es la verdad. La verdad de Dios tiene la misión dar vida abundante,
paz y libertad duradera.
- La palabra espíritu.
Juan 6. 63 2) las palabras que
yo os he hablado son espíritu y son vida. 1) El espíritu es el que da vida; la carne (polvo) para nada aprovecha.
Con esta afirmación nuestro Señor estaba poniente la
base ministerial bajo la cual el Nuevo Pacto se habría de guiar. Razón por la
cual el apóstol Pablo retoma el tema posteriormente y lo amplía explicando la
importancia que este tiene en la vida exitosa del hijo de Dios.
Jesus, básicamente separa la carne o el polvo del espíritu al afirmar que este no tiene provecho o utilidad alguna (La carne para nada aprovecha), es
por esta razón que sus palabras no están dirigidas al intelecto humano en forma
de letra convincente, sino más bien sus palabras son espíritu o espirituales
por lo que habrán de encontrar su lugar correcto en el espíritu y no en la
mente del hombre.
Mantenga presente que la palabra espíritu no cambia al hombre
de afuera hacia adentro, sino por el contrario es de adentro hacia afuera, desde
lo interno de nuestra intuición y conciencia espiritual que parte hacia nuestra
alma y cuerpo. Entonces, estaremos en el camino que nos lleva a la verdad y nos
da la vida. Es su palabra revelada y espiritual la que puede alumbrar nuestro entendimiento espiritual y transformar
nuestras vidas y darnos gozo y paz a cada paso por este camino de nueva vida.
- Cuando las escrituras ya no son letras sino revelación.
Lucas 4. 21Y comenzó a decirles: Hoy
se ha cumplido esta Escritura delante de
vosotros. 22Y
todos …estaban maravillados de las palabras de gracia que salían de su boca
Nuestro Señor entrando en la sinagoga, se levanta a leer el libro del profeta Isaías conforme era costumbre, todo transcurría como siempre, excepto que esta vez quienes estaban presentes obtendrían una escritura que al ser hablada fluía entrando en sus sus vidas de manera especial; era la misma escritura de entes, pero esta vez llegaba en forma de revelación espiritual dando vida y produciendo maravillas en sus corazónes.
Isaías 9.8El Señor envió
palabra a Jacob, y cayó en Israel.
Está muy claro cuando lo
vemos con sencillez de corazón y entendemos que Jacob e Israel fueron el nombre
antiguo y nuevo del nieto de Abraham. Jacob al significar suplantador, señalaba
a su carne o humanidad, específicamente en el momento en que engañó a su padre
Isaac haciéndose pasar por Esaú. Por el contrario, Israel se refiere a su
renacimiento como heredero de la promesa y padre de multitudes.
La palabra, Dios la enviaba
a Jacob, pero una vez que esta llegaba a él surtía su efecto en Israel. Si tan
solo por un momento fuéramos capaces de apartar la mirada de nuestro Jacob
(humanidad) y dejar que su mensaje saque la mejor versión de nuestras vidas
entonces podríamos decir que somos verdaderamente herederos de la promesa y bendición en Abraham.
Gálatas 3. 6Así
Abraham creyó a Dios, y le fue contado por justicia. 7Sabed, por
tanto, que los que son de fe, éstos son hijos de Abraham. 8Y la
Escritura, previendo que Dios había de justificar por la fe a los gentiles, dio
de antemano la buena nueva a Abraham, diciendo: En ti serán benditas todas las
naciones. 9De modo que los de la fe son bendecidos con el creyente
Abraham.
Recuerdo que en mi
juventud y en medio de mis incesables luchas por cumplir a perfección toda la ley
divina con sus puntos y comas, en una ocasión escuche a un predicador llamado
Abel enseñar; la verdad no entendía la razón del porque aquel mensaje suave y pausado me producía
tanta alegría al escucharlo. Este predicador, no saltaba, tampoco alzaba su voz
y no recuerdo haberle visto hablar en lenguas en su programa de televisión,
pero a pesar de su pasividad “esas palabras salían de su boca llenas de vida y
poder transformador,” ellas no llegaban a mi mente sino más adentro inundando
mi espíritu con felicidad.
- ¿El ministerio de muerte grabado con letras en piedras o el ministerio del
espíritu con gloria? 2 Corintios 3: 7,8.
Ø Escogiendo ministerios.
2 Corintios 3.
6el cual asimismo nos hizo
ministros competentes de un nuevo pacto, no de la letra, sino del espíritu.
7Y si el ministerio de muerte grabado con letras en piedras… 8¿cómo no será
más bien con gloria el ministerio del espíritu?
9Porque si el ministerio de condenación fue con gloria, mucho más abundará en
gloria el ministerio de justificación.
Como usted recordará nuestro
Señor Jesús fue quien primeramente afirmó que la carne no tiene provecho alguno
y que las palabras habladas por Él no eran mera letra sino espíritu y vida. El
apóstol Pablo en esta ocasión lleva el tema un poco las allá al asegurar que es
Dios quien le ha hecho un ministro competente en este Nuevo Pacto del espíritu
y no de la letra. Lo primero a notar aquí, es el hecho de que el apóstol no habla del Espíritu Santo sino del espíritu del hombre. Dando a entender la necesidad
de separar con la espada de la palabra (Heb 4:12) la carne y ponerla al lado de la cruz y al espíritu al lado de la fe.
Ahora, ¿y porque la carne no
aprovecha en el reino de Dios?, la razón es sencilla, la carne no se sujeta a
la ley divina ni tampoco (aunque quisiera) puede. O sea, la carne no se
convierte, lo que se convirtió al Señor con nobleza de corazón fue nuestra alma
y entonces nuestro espíritu fue vivificado en Él.
*Romanos 8. 7Por cuanto los designios de la carne …no se sujetan
a la ley de Dios, ni tampoco pueden. 8y los que viven
según la carne no pueden agradar a Dios.
Aquí es donde nos damos cuenta si contamos con los
tres pasos que se cumplen en Jesús: El camino, la verdad y la vida. Si estamos
en su camino, su verdad debe producir en nuestra espíritu vida y vida en
abundancia.
El problema es cuando queremos que la palabra surta
efecto en Jacob y no en Israel, recordemos, la palabra espíritu trabaja de
adentro hacia afuera. Cuando queremos cambiar o convertir la carne a través de
la obediencia a la ley, entonces nos encontraremos con un conflicto en nuestra
vidas y a menudo nos estaremos diciendo “¡Miserable
de mí! ¿quién me librará de este cuerpo de muerte? R.7:24”
*Romanos 4.15Pues la ley produce ira (mata al espíritu); pero donde no hay ley, tampoco hay transgresión.
Al no poder alcanzar la obediencia completa a la
ley nos produce frustración, tristeza y hasta ira. Pero cuando la ley ya no
está y la frustración ha sido apartada, entonces el ministerio del espíritu y la
palabra de vida toma control y nos hace lograr lo que nunca pudimos. Ahora nos
damos cuenta de que al encontrar el poderoso ministerio del espíritu también nos encontramos
con el ministerio de la justificación y finalmente alcanzamos una conciencia
limpia por la sangre de su sacrificio.
- Muerte en la olla.
2 Reyes 4. 38Eliseo
volvió a Gilgal cuando había una grande hambre en la tierra. Y los hijos de los
profetas estaban con él, por lo que dijo a su criado: Pon una olla grande, y
haz potaje para los hijos de los profetas. 39Y salió uno al campo a
recoger hierbas, y halló una como parra montés, y de
ella llenó su falda de calabazas silvestres; y volvió, y las cortó en la olla
del potaje, pues no sabía lo que era. 40Después
sirvió para que comieran los hombres; pero sucedió que comiendo ellos de aquel
guisado, gritaron diciendo: ¡Varón de Dios, hay muerte en esa olla! Y no lo
pudieron comer.
Está de por demás decir que el reino de Dios no está basado en buenas intenciones sino en el camino y la verdad que nos lleva a la
vida, esto es Jesús. Cuando usamos nuestras propias recetas y desechamos el fundamento
establecido, el fin será el mismo. El creyente morirá tarde o temprano, o quizá
termine en apostasía negando a un Dios el cual cree no le ayudó a triunfar en
su vida personal y familiar.
Todo esto ha sido un proceso que se ha dado en sus vidas, mientras día tras día intentaron negociar o forzar su carne mediante la letra o sacrificios queriendo educarla o convertirla, sin saber ellos que el
Nuevo Pacto operando a través de su ministerio del espíritu ha proveído para esto con su poder.
Es muy
importante asegurarnos que nuestro mensaje verdaderamente esté llevando vida y
no sea una combinación mortal de cosas buenas mezcladas con una extraña y
desconocida y mortal parra montes.
- Haciendo la separación.
Colosenses 2. 10y vosotros estáis completos en él, que es la cabeza de todo principado y potestad.11En
él también fuisteis circuncidados con
circuncisión no hecha a mano, al echar de vosotros
el cuerpo pecaminoso carnal, en la circuncisión de Cristo.
Isaías
52.1Despierta, despierta, vístete de poder, oh Sion; vístete tu ropa
hermosa, oh Jerusalén, ciudad santa; porque nunca más vendrá a ti incircunciso.
Para poder estar
completos en Cristo Jesús necesitamos permitir que nuestra parte carnal sea
desechada mediante circuncisión espiritual, recordemos que la carne de nada
aprovecha y que Jacob debe apartarse de modo que Israel pueda florecer.
Hablando posicionalmente,
en Cristo no existen mitades, ni creyentes incompletos, no hay medio santos y
medio inmundos, solo santos.
Solamente en este ministerio nuestro ser espiritual es separado de nuestra parte terrenal o carnal declarando al creyente perfecto una vez y para siempre mediante el poder de la fe.
Hebreos 10. 14porque con una sola ofrenda hizo perfectos para
siempre a los santificados.
- Reconciliándonos.
Efesios 2.14Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos
hizo uno, derribando la pared intermedia de separación, 15aboliendo *en su carne las
enemistades, la ley de los mandamientos
expresados en ordenanzas, para crear en sí
mismo de los dos un solo y nuevo hombre, haciendo la paz, 16y
mediante la cruz reconciliar
con Dios a ambos en un
solo cuerpo, matando
en ella las enemistades.
El apóstol parte
sobre la base de Israel y los gentiles, y la pared intermedia solo para
elevarse y revelarnos verdades que son de suma importancia en cuanto a nuestro
naturaleza humana y celestial.
V.15En la carne se producen enemistades o lucha
continua cuando tratamos a nuestro modo de cumplir los mandamientos. Además, se
nos dice que Jesús abolió o destruyó esas enemistades al crear de dos hombres uno
solo al hacer la paz mediante la cruz al V.16reconciliarnos en ella.
Solo de este
modo el conflicto interno del hombre se irá y entonces encontrará completa
paz al estar reconciliado por siempre en la cruz.
Solo Jesús
puede armonizar nuestro ser interno permanentemente y crucificar, circuncidar o
sepultar por la fe nuestra carne, encontrando así nosotros el dominio y
autocontrol que en algún momento pensamos no podríamos alcanzar.
- Adán disminuye y Cristo es formado.
Gálatas 4.19Hijitos míos, por quienes vuelvo a sufrir dolores de parto, hasta que Cristo sea formado en vosotros.
La palabra espíritu
o ministerio del espíritu alimenta a Jesús en nuestras vidas formándolo cada vez
más claramente hasta que somos transformados a su misma imagen. La letra, por
el contrario, alimenta al hombre carnal y Adánico a tal grado que la persona
termina volviendo atrás y dejando los caminos de Dios.
2 Corintios 4.18Por tanto, nosotros todos,
mirando a cara descubierta como en un espejo la gloria del Señor, somos
transformados de gloria en gloria en la misma imagen, como por el Espíritu del
Señor.
Cualquier observación sírvase escribir a: cristomiltonalonso@gmail.com
Para ver: "Y les daré un nuevo nombre"
Para ver: El Lenguaje de dos Siglos. N1
Presione para ver: El espíritu con gloria Vs. ministerio de muerte.
Para leer: La Biblia no es la palabra de Dios (Es la expresión de Dios)
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