¡El Evangelio “Pagano” & El Evangelio Eterno, de la Gracia de Dios! Parte N.1








¡El Evangelio “Pagano” & El Evangelio Eterno, de la Gracia de Dios!

PARTE 1.


Introducción.



Es innegable que desde los principios de la era cristiana se presentaron serios embates sobre como preservar pura la fe desde un punto de vista doctrinal. También me llama la atención sobre cómo el apóstol Pedro con toda sinceridad reconoce que dentro de los escritos paulinos existen algunas cosas que aún para él le eran difíciles de entender.  2 Pedro 3:16.

Existieron dos propuestas bastante influyentes dentro del mundo cristiano, una que inspirada en el ejemplo de Jesús de Nazaret invitaba con ardor a seguir el ejemplo del Dios que en su humillación se hizo carne y que como buen judío se hizo siervo de la ley; guardando para esto todo tipo de ritos y símbolos consistentes en abluciones y ordenanzas acerca de la carne impuestas hasta el tiempo de reformar todas las cosas. Todo esto formó parte del antiguo sistema de culto sustentado en símbolos que no eran más que la sombra de los bienes que habríamos de recibir después de la muerte y resurrección de Cristo Jesús.    Hebreos 8:5,13; 9:1,9,10; 10:1,9.
.                                                                                       


Ahora bien...el primer pacto tenía ordenanzas de culto…He aquí que vengo, oh Dios, para hacer tu voluntad; quita lo primero para establecer lo último. Hebreos 9:1; 10:9. 



¿Qué tanto de este culto antiguo debería ser observado por el cristiano? Esta era la gran pregunta; ya que a los ojos del apóstol Pablo el cristianismo de entonces corría el inminente peligro de ser judaizado (Gálatas 2:14). El asunto no era sencillo puesto que aquella amenaza no provenía de alguno de aquellos líderes que apuñaron seguidores sobre sí como Teudas o Judas el Galileo (Hechos 2:36,37). Aunque a decir verdad el problema provenía de uno que en nuestro espacio de tiempo fue también llamado Galileo; pero que en la eternidad nunca dejó de ser Dios (Isaías 9:6); solo que en su relación con los hombres se ocultaría como en los tiempos del tabernáculo Mosaico detrás de un velo llamado carne (Hebreos 10:20), razón por lo que fue conocido como “el hijo del hombre”. No debemos de olvidar que este velo al ser traspasado por la lanza fue rasgado y al exclamar “consumado es” nos estaba indicando que con su muerte y resurrección vendría también el fin y principio de un nuevo pacto. San Juan 19:34; Lucas 23:45; Hebreos 13:20.



San Pablo hace un fuerte hincapié en que su mensaje a presentado a Cristo y a este crucificado (1 Corintios 2:1; Gálatas 3:1; Romanos 5:16; 7:4), por lo que si algunos andan presentando a otro Cristo (el del velo) y otro evangelio (2 Corintios 11:4,5; Gálatas 1:6); que a pesar de tener su fuente de inspiración en Jesús de Nazaret se convertiría en una versión reciclada, y esclavizante de la ley. Puesto que su fundamento consistía en pretender imitar al Único y Perfecto que como hombre pudo dar cumplimiento y fin a la ley.


Pero nosotros predicamos a Cristo crucificado, para los judíos ciertamente tropezadero. 1 Corintios 1:23.




¡El Evangelio “Pagano” & El Evangelio Eterno, de la Gracia de Dios!

Introducción.

Para el apóstol, nuestra salvación no debe ser ligada en manera alguna a las obras, y esto pesar de que las mismas irremediablemente se han de manifestar en la vida del cristiano, de manera que nuestra salvación no es por obras, pero sí para obras (Efesios 2:9,10). Motivo suficiente por lo que a su parecer: quienes no enseñaran de esta manera, habrían de ser considerados como obreros fraudulentos disfrazados como apóstoles del Señor.   2 Corintios 11:13; Filipenses 3:2,3; Gálatas 2:9-14; 3:16,17; 5:12è Filipenses 3:18-20.

.                                                                                                               

¡A tal extremo afectaría esta situación a los creyentes de Galacia que Pablo les acusa de haber caído en la necedad de querer alcanzar salvación a través de imitar el modelo impuesto de Jesús bajo la ley!   Gálatas 3:1-3.



¡Oh Gálatas insensatos! ¿Quién os fascinó para no obedecer a la verdad, a vosotros ante cuyos ojos Jesucristo fue ya presentado claramente entre vosotros como crucificado?     Gálatas 3:1.
Así que, hermanos, cuando, fui a vosotros…no fui con excelencia de palabras…pues me propuse no saber entre vosotros cosa alguna sino a Jesucristo, y a este crucificado.  1 Corintios 2:1,2.
De manera que nosotros de aquí en adelante a nadie conocemos según la carne; y aún si a Cristo lo conocimos según la carne (bajo la ley), ya no lo conocemos así.   2 Corintios 5:16.

…hermanos míos, habéis muerto a la ley mediante el cuerpo de Cristo, para que seáis de otro, del que resucitó de los muertos.    Romanos 7:4.


Con respecto a esta situación el apóstol Pablo aclara que este evangelio diferente, que amenazaba con ahogar el cristianismo de entonces (y el de hoy) no provenía de Cristo; sino de algunos que queriendo justificarse por el cumplimiento de la ley y la observancia de sus ritos y abluciones ¡Lo querían pervertir! (Gálatas 1:6-8; 2:21; 5:4).

El apóstol reconoce que los sacrificios y duro trato del cuerpo que estos hombres se imponían sobre sí, innegablemente contenía cierta reputación de “sabiduría en culto”, puesto que pretendía imponer obediencia a través de preceptos tales como: No manejes, ni aún gustes, ni aun toques; pero que a la postre resultaban ser ineficaces en contra de los apetitos de la carne.    Colosenses 2:20-23; Hebreos 9:9,10; 1 Timoteo 4:6-8; Romanos 10:2-4; 1 Corintios 3:1.

Este tema es tocado a profundidad en su carta a los romanos en donde da por un hecho que el mandamiento trae malicia; por lo que revive el pecado (Romanos 7:7,8). Caso contrario nos ha sucedido a nosotros que por no estar esclavizados bajo la ley; la gracia ha de producir la obediencia que proviene de un corazón agradecido (I Juan 4:18; I Corintios 6:12; Tito 1:11,12). Por otro lado, la ley al ser condenatoria, ha de producir creyentes que al estar bajo sentencia de culpabilidad se rinden “más por temor” que por amor.    Romanos 4:15; 5:13; 10:4; 1 Juan 4:18.






Podríamos decir entonces: Que por haber sido mal trazado por algunos el mensaje original del evangelio; nos hemos visto enriquecidos en cuanto a la amplitud o riqueza de palabra que en las escrituras podemos encontrar. Un ejemplo de esto lo tenemos en la carta a los romanos en donde Pablo se vio por momentos obligado a bajar la profundidad de su enseñanza; hasta llegar a trasmitirla desde un punto de vista totalmente humano (Romanos 6:19). Además, también notaremos cómo este hombre trató con los creyentes de Corinto en forma separada. Puesto que con unos pudo hablar abiertamente sobre la sabiduría y misterios del siglo venidero, mientras que a los otros debió hablarles carnalmente como a niños y no como a espirituales. I Corintios 2:6; 3:1,2.

Le invito cordialmente a ver nuestros videos en YouTube: https://www.youtube.com/channel/UCUAfmqgAcEdvpATkHIsEWHA
O seguirnos en Facebook: https://www.facebook.com/evangelioeternohoy/

Comentarios

Entradas populares de este blog

¡Muerte en la Olla! (Los que están en la carne Vs. los espirituales).

Significado del Número 6 en la Biblia. (666)

El Creyente; Santuario y Cielo de Dios