El Lenguaje de dos Siglos y la Resurrección. Parte N.4
El lenguaje de dos siglos y la resurrección.
Con Él – La
clave para resurrección.
Filipenses 3:10-12. …a
fin de conocerle, sentir en mí el poder de su resurrección,
y la participación de sus padecimientos, haciéndome semejante a él en su
muerte, *a fin de llegar a la resurrección de entre los muertos.
No que lo haya alcanzado o que ya haya llegado a ser perfecto,
sino que sigo adelante, a fin de poder alcanzar (Nos resucitará 2 Cts.
4:14) aquello para lo cual también fui alcanzado (Nos
resucitó Ef. 2:5) por Cristo Jesús. (*Los dos párrafos en letra cursiva tomados de
la versión Dios habla hoy).
Por esta razón el apóstol
se hace a si mismo semejante a él en su muerte a fin de llegar a la resurrección
de entre los muertos y de ese modo alcanzar (En
lo temporal de nuestra transformación externa) aquello con lo
cual ya fue por Cristo alcanzado (En lo espiritual y eterno
de nuestra ya consumada muerte y resurrección). O sea, estamos
humanamente esperando recibir aquello que espiritualmente por Cristo ya nos fue
dado.
*No
está de más considerar también que el apóstol se pueda estar refiriendo a
alcanzar la resurrección de entre los muertos con él, puesto que el
cristiano ya no muere solo duerme (1 Corintios 15:51). Razón
por la que inmediatamente advierte “no que ya haya llegado a ser perfecto”,
sino que sigo adelante ...para alcanzar.
Es posible, por tanto, que
esté hablando en el sentido de llevar (tener presente) con nosotros su muerte
para que la vida de él también se manifieste en nuestros cuerpos (2
Corintios 4:10-12). O quizá, lo más probable es que hable en
ambos sentidos.
.
El lenguaje de dos siglos y la resurrección.
Sembrándonos;
Con Él – La clave para resurrección.
Así también en la resurrección de
los muertos. Se siembra en
corrupción, resucitará en incorrupción. . se siembra cuerpo animal, resucitará cuerpo espiritual.
. pero esto digo, hermanos: que la carne y sangre no pueden heredar el reino
de Dios, ni la corrupción incorrupción. . porque es necesario que esto
corruptible se vista de incorrupción, y esto mortal se vista de inmortalidad. 1 Corintios
15:42,44,50,53. è2
Corintios 5:1-4; Filipenses 3:21.
.
En el capítulo 15 de la
primer carta a los Corintios el apóstol vuelve su mirada a lo temporal de esta
manifestación gloriosa en nuestro espacio de tiempo solo para corregir la
confusión (que estaba
llevando al error) de algunos que creían que la resurrección
no era más que el levantamiento por parte de Dios de un cuerpo que aunque nuevo
habría de ser carnal, por lo que a sus ojos esto no era más que la extensión de
una vida terrenal y no una verdadera resurrección o restauración para funcionar
en una nueva forma.
Sin embargo, hemos de
agregar que la enseñanza sobre cómo se alcanza la resurrección
de nuestros cuerpos en esta dimensión o espacio de tiempo, resulta de un valor
incalculable para comprender los pasos que hemos dado quienes ya hemos sido
resucitados desde la eternidad en lo espiritual. Esto digo, al menos de
aquellos que lo han sido “mediante la fe” en el poder de un Dios para el que no
hay nada imposible.
Siguiendo, pues, la pista
de las huellas (hacia
la muerte y la resurrección) que el apóstol nos deja ver, notemos
con especial atención algunas de las palabras (resaltadas en negro) que nos permiten
descifrar este paradigma. Por ejemplo, se nos afirma categóricamente que carne
y sangre no pueden heredar el reino de Dios (1 Corintios 15:50)
por lo que se nos asegura que nuestro cuerpo deberá ser sembrado primero
(1 Corintios 15:42,44), para luego sufrir el
cambio externo de nuestra casa o cuerpo temporal (material)
por uno espiritual. (2 Corintios 5:1-4). En
la carta a los Corintios se nos habla de sembrar, en Romanos (6:5)
se nos dice que hemos sido plantados (sembrados) o
sepultados con él. Además, se nos enseña a considerarnos ya muertos mediante el
cuerpo de Cristo por tanto como usted verá la fe no encuentra barreras ni
puertas temporales que nos impidan disfrutar de este nuestro eterno presente
que (humana, por vista y carnalmente hablando)
aún está en lo porvenir.
.. porque también Cristo padeció por nosotros,
dejándonos ejemplo, para que sigáis sus pisadas. 1 Pedro 2:21.
Negar que nuestra
resurrección se ha efectuado (viendo como Dios ve y hablando como Dios lo habla),
equivale a negar la fe. Pues si Cristo no resucitó estamos en nuestros pecados (1
Corintios 15:17,32). Porque sí él no lo hizo; usted tampoco.
Y si usted no ha sido muerto, sepultado y resucitado con él, en pecado
permanece; usted todavía está bajo el régimen la ley, por tanto, en la carne,
alejado del régimen nuevo del Espíritu y en riesgo de condenación. Romanos 6:1-11; 7:1-6;
8:1-12.
El lenguaje de dos siglos y la resurrección.
Resucitados;
Con Él – La clave para resurrección.
. . . lo
que tú siembras
no se vivifica, si no muere antes. 1 Corintios 15:36.
Sólo aquél que ha sembrado
o plantado su carne y sangre con Cristo en la cruz podrá confiar en que el
cuerpo de pecado ha sido destruido (Romanos 6:6,7; 8:3; 1
Pedro 4:1), por lo que ahora es participe con toda exactitud de la
misma clase de justicia y santidad de Dios.
2 Corintios 5:21.
Y vosotros estáis completos en él. .
En él fuisteis circuncidados. .al echar de vosotros el cuerpo pecaminoso
carnal. . sepultados con él en el bautismo en el cuál fuisteis . . resucitados con él,
mediante la fe en el poder de Dios. Colosenses 2:10-12.
.
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