Santa Cena.Parte 5 de 7. ¡De la ley, al libertinaje extremo!







Origen de La Santa Cena o Pascua Judía.
Ø  Celebración extrema en la fiesta o “cena gentil”

La enseñanza Paulina de gracia y libertad es llevada erróneamente hasta el extremo, en esta fiesta se habían pasado de copas hasta caer en embriagues; y lo que es peor, los panes de sinceridad y verdad se habían dejado olvidados en casa y los creyentes en su ignorancia y desinterés por celebrar correctamente habían transformado una fiesta de vida y bendición en una de enfermedad, maldición y muerte, trayendo esto consecuencias catastróficas a sus vidas y familias.

Tómese cada uno un cordero según… más si la familia fuere tan pequeña que no baste para comer el cordero, entonces él y su vecino inmediato a su casa tomarán uno según el número de personas, conforme al comer de cada hombre, haréis la cuenta sobre el cordero. Éxodo 12:3,4.

La cena en el nuevo testamento tiene como base la unidad y el amor, una familia habría de compartir con la otra, quien tiene de más unirse con quien tiene menos y lo que es más importante, no debemos deslizarnos desde el extremo de la ley hasta el del libertinaje puesto que de hacerlo así la copa de vida podría tornarse en muerte.     
1 Corintios 11.17-22.
17. Pero al anunciaros lo que sigue, no os alabo; porque no os congregáis para lo mejor, sino para lo peor.
18. Pues en primer lugar, cuando os reunís como iglesia, oigo que hay entre vosotros DIVISIONES; y en parte lo creo.
19. Porque es preciso que entre vosotros haya disensiones, para que se hagan manifiestos los que son 52aprobados.
20. Cuando, pues, os reunís vosotros, *esto no es comer la cena del Señor. *(sí es, pero en comunión V.18, 19).
21. Porque al comer, cada uno SE ADELANTA a tomar SU PROPIA CENA; y UNO TIENE HAMBRE, y otro se embriaga.    
22. Pues qué, ¿no tenéis casas en que comáis y bebáis? ¿O menospreciáis la iglesia de Dios, y avergonzáis a los que no tienen nada? ¿Qué os diré? ¿Os alabaré? En esto no os alabo.

La cena del Señor es comunión (gr. Koinonía) con Cristo… así como comunión con los demás miembros del cuerpo de Cristo.      Biblia de estudio pentecostal. PG. 1628.

Una cena sin comunión, donde como pan no nos partimos; no puede ser cena (v.20), evidentemente los Corintios olvidaron rápidamente el verdadero significado de la fiesta de celebración, llegando a esta sin los panes de sinceridad y verdad; ante lo cual el apóstol expresa: Cuando, pues, os reunís vosotros, esto no es comer la cena del Señor.
52Daniel 5:27; Efesios 4:13; 2 Corintios 10:13.

La Santa Cena.

Ante el desorden reinante Pablo “mete en cintura” a los Corintios trayendo el relato de la Cena que tuvo nuestro Señor con sus discípulos e indicándoles que la celebración neotestamentaria de la cena; nada tenía que ver con la glotonería, divisiones o embriaguez en la que estaban incurriendo.

Los Corintios entendieron “mucho más” de lo que el apóstol realmente quiso enseñarles al decir “celebremos la fiesta” o 53todo me es licito, pero no todo conviene, razón por la que cada uno de ellos estaba celebrando “su fiesta privada” que incluía una buena cantidad de alimentos y lo necesario para alegrarse en demasía (embriagarse).


 I Corintios 11.27-34.
V.27. De manera que cualquiera que comiere este pan (mi carne) o bebiere esta copa (mi sangre) del Señor indignamente, será culpado del cuerpo y de la sangre del Señor.


Nota sobre este verso por la Biblia Plenitud PG. 1493.
El contexto indica alguna práctica indigna que profana “el significado de la cena del Señor. No se refiere al examen del diario andar con Cristo por parte de la gente para determinar si son dignos o no de la comunión. Participar de ella de manera digna es atribuir a la acción de Cristo todo su valor.     


Comer y beber juicio, es no discernir su cuerpo y tomar de su copa indignamente. Como se explicó anteriormente en la biblia de Estudio Plenitud, indignamente debe de ser tomado aquí según su contexto, no es un “examen de pecado” sino un examen de fondo en cuanto al procedimiento y sentido de cómo se lleva a cado la cena o celebración.  Es no guardar la comunión y no partirnos –como pan- en el amor de la sinceridad y verdad. Cuando rechazamos al débil en la fe, estamos abofeteando una vez más al Señor y separándonos de la practica 54 correcta de celebración.
 Al no discernir que su copa equivale a quedarnos en el culto mosaico y menospreciar el Nuevo Pacto sellado por su sangre. Por tanto, quien así hace traspasa el costado del Señor por menosprecio y por tanto será culpado del cuerpo de Cristo.
                                                                                                                   
53I Co. 10.23. 54 1 Corintios 8:12.

La Santa Cena.
29. Porque el que come y bebe indignamente, sin discernir el cuerpo del Señor, juicio come y bebe para sí.


Participar de la cena “sin discernir” que el cuerpo del Señor ya fue ofrecido, y que además nos ha sido por verdadera comida, es 55crucificar de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios. Cuando por estar atados a los símbolos no reconocemos o ignoramos voluntariamente que la celebración correcta es participar con Él hasta la consumación de su última copa, la copa neotestamentaria de su crucifixión, muerte y resurrección.



Petición de Santiago y de Juan
(Mr. 10.35–45)
20Entonces se le acercó la madre de los hijos de Zebedeo con sus hijos, postrándose ante él y pidiéndole algo. 21El le dijo: ¿Qué quieres? Ella le dijo: Ordena que en tu reino se sienten estos dos hijos míos, el uno a tu derecha, y el otro a tu izquierda. 22Entonces Jesús respondiendo, dijo: No sabéis lo que pedís. ¿Podéis beber del vaso que yo he de beber, y ser bautizados con el bautismo con que yo soy bautizado? Y ellos le dijeron: Podemos. 23El les dijo: A la verdad, de mi vaso beberéis, y con el bautismo con que yo soy bautizado, seréis bautizados; pero el sentaros a mi derecha y a mi izquierda, no es mío darlo, sino a aquellos para quienes está preparado por mi Padre.




En ella el creyente es unido por el Espíritu a SU CUERPO y al igual que Santiago y Juan somo hechos participes de SU BAUTISMO, el cual equivale a ser sepultados y resucitados en Él y por tanto comiendo o siendo participes de su carne y sangre los que “son 56 verdadera comida y verdadera bebida” o Santa Cena de la copa contenida en su Nuevo Pacto.  Participar correctamente de la cena del Señor contenida en el 57Nuevo y Eterno Pacto es no tener por inmunda SU sangre. Es no hacer afrenta o deshonra al Espíritu de gracia; como claramente muchos siguiendo los pasos de la iglesia Universal y la iglesia judía siguen haciendo al adjudicar supuestos poderes regenerativos y salvíficos a elementos que no son más que la sombra, o símbolo de aquel que habita hoy entre nosotros, no es otra cosa más que participar de idolatría y por tanto equivale a participar de la mesa equivocada.
Tristemente, el pueblo llamado a no comprometer la verdad del evangelio y a preservar su 58pureza doctrinal, pareciera haber caído en las mismas prácticas incorrectas de aquellos que enseñan que sin la participación ritual de los “sagrados sacramentos” (dentro de los cuales se encuentra “la copa y el vino”) no se puede encontrar Salvación.

Ir a parte N.6. Santa Cena ¿Mesa del Señor o mesa de Demonios?

55Hebreos 6:6. 56Juan 6:55. 57Hebreos 9:15-17; 13:20.  58Romanos 6:17; Efesios 4:14; 2 Tesalonicenses 2:15; 1 Timoteo 1:3.     

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